Miles de equipiers siguieron el XIII Encuentro Mundial de Turín 2024 en la plataforma de streaming en directo desde sus casas en todo el mundo. Muchos de los que hubieran querido participar tuvieron muchos problemas con los visados y las autorizaciones de acceso en nuestro país.

La imponente máquina de la logística: desde la inscripción hasta el viaje, pasando por el alojamiento en hoteles para las más de 7500 personas presentes en el encuentro, estuvo dirigida por Mario y Maddalena Brossa, que subrayan que las parejas: «podrían haber sido más si nuestras embajadas no hubieran denegado, a pesar de todos los documentos presentados, un número nada despreciable de visados.

Al menos un centenar de parejas, después de haber comprado incluso el billete de avión, no pudieron marcharse. Personas que habían ahorrado durante años para poder venir a Turín. A pesar del gran trabajo realizado, ni siquiera el equipo de Turín 2024 pudo atender todas las solicitudes de embajadas y consulados, a pesar de contar con todas las garantías exigidas. A muchos que no disponían de un saldo considerable en su cuenta bancaria se les denegó el visado.

En cualquier caso, se ha hecho mucho porque, a pesar de las dificultades, se han recuperado muchas situaciones, pero ha hecho falta un trabajo constante en casos individuales, para cada país.