A mitad del XIII Encuentro Internacional de las Equipos Notre-Dame. Lo que es evidente es el clima de fraternidad y amistad que se respira en la Inalpi Arena. Caras, sonrisas, apretones de manos, una invasión pacífica para la ciudad de Turín que se reúne en oración y se apasiona por los espectáculos, participa admirada en los itinerarios espirituales para conocer la vida y obras de los santos y profetas de la caridad.
No hace falta expresar mucho, porque basta observar la intensidad de la oración, el recogimiento de la Celebración Eucarística, el canto coral y la escucha de los oradores y testigos para darse cuenta de la belleza de este Encuentro.
También la organización está haciendo todo lo posible para que los días sean ordenados y serenos. Hasta el sábado continuará este momento especial para el Movimiento que ha entrado en el corazón de los turineses.